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Sobre la tertulia La
elite hispano-criolla pasaba sus tardes en las tertulias, el
ámbito de sociabilidad por excelencia y uno de los mayores
pasatiempos de las damas.
A lo largo de extendidas veladas las tertulias eran
inmejorable ocasión para bailar, escuchar música, cantar,
cortejar, encontrar pareja y en ocasiones, conspirar contra
el gobierno de turno.
Una tertulia consiste, en esencia, en una simple reunión
de amigos en la que cada uno expresa con libertad sus ideas
y ocurrencias y las contrasta con las del resto. Herederas
de las sobremesas que seguían a los banquetes griegos, de
los salones franceses y de las intelectuales cafeterías
vienesas, las tertulias han llegado a arraigar en la Buenos
Aires colonial |
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